Menú principal
Gobierno Abierto de Castilla y León
Gobierno Abierto de Castilla y León
Sanidad con criterios de calidad y equidad
18 de junio de 2020
Finalizado
Dotar un fondo de 250 millones de euros para la recuperación de la sanidad, destinado a paliar los efectos de COVID-19 que, considerando la incidencia territorial de la pandemia, tenga como principales objetivos: reforzar la Atención Primaria para hacer frente a la fase de desescalada, que incluya contratación de profesionales y suministros sanitarios; reforzar los dispositivos de Salud Pública mediante la contratación de profesionales de epidemiología y medicina preventiva; mejorar la estructura y la dotación de las Unidades de Cuidados Intensivos; reforzar la asistencia a las emergencias garantizando una dotación suficiente de Unidades Medicalizadas de Emergencias (UME) y de Soporte Vital Básico (SVB); establecer un sistema de compra y aprovisionamiento de equipos de protección que garantice las existencias durante los siguientes meses; potenciar la recuperación de la actividad ordinaria y la reducción de las demoras que se hayan podido producir a raíz de la pandemia tanto en intervenciones quirúrgicas, como consultas externas o pruebas diagnósticas y reconocer el esfuerzo de los empleados de SACYL y de los servicios territoriales implicados en la lucha contra esta pandemia y su control mediante una gratificación, siempre que se haya realizado la jornada de manera efectiva. La Junta de Castilla y León dará cuentas periódicamente a los diferentes grupos parlamentarios del uso de este fondo y de las actividades desarrolladas con el mismo.
La Consejería de Sanidad, no solo desde la declaración de la pandemia por COVID-19, ha tramitado de forma continuada los contratos necesarios para asegurar los suministros de equipamiento clínico, tecnología y material de protección y de diagnóstico, que permitan disponer de recursos suficientes en el ámbito de la Atención Primaria, de tal forma que se puedan atender las necesidades de los distintos centros sanitarios de Sacyl durante varios meses según la previsión de necesidades que se ha realizado y que se va actualizando de forma permanente.
Los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de Castilla y León para 2021, contribuyen a seguir cumpliendo este compromiso fijando un incremento especialmente relevante, de más de un 9%; del presupuesto destinado a gastos corrientes en Atención Primaria, que permitirá seguir protegiendo adecuadamente a los profesionales mediante la adquisición de equipos de protección adecuados y de pruebas de detección COVID, y dotarles de los medios materiales necesarios para facilitar el desempeño de sus funciones.
Además de garantizar la dispoción de suministros sanitarios suficientes, se ha reforzado la Atención Primaria, mediante la adquisición de equipamiento clínico para afrontar los efectos de la pandemia y planificar las desescaladas, con una inversión superior a los 5 millones de euros en 2021 que está permitiendo la adaptación digital de la mayoría de los equipos radiológicos ubicados en centros de salud y centros de especialidades.
La Consejería de Sanidad ha reforzado los dispositivos de Salud Pública para lo que se se les ha dotado de recursos materiales y personales, asegurando una mayor profesionalización de personal destinado a estas tareas, y del acceso a nuevos sistemas de información más eficientes para la vigilancia y control epidemiológico, que permiten dedicar más esfuerzos a las actividades estratégicas.
En conreto, se ha reforzado el personal de la Dirección General de Salud Pública y de los Servicios Territoriales de Sanidad, claves en el ejercicio de las labores de prevención y vigilancia epidemiológica para la lucha contra la pandemia, así como en el desarrollo de otras funciones relacionadas con la salud pública y directamente vinculadas con la COVID-19, entre las que destacan las funciones de inspección, vigilancia y control oficial realizadas por los Servicios Oficiales de Veterinarios y Farmacéuticos de Castilla y León, destacando el incremento de personal realizado en 2020, superior al 61 % en el personal médico y al 23 % en el personal de enfermería, incorporando asimismo otro personal imprescindible en la situación de pandemia como farmacéuticos, veterinarios y personal de laboratorio, así como personal administrativo, informático y de servicios.
Los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de Castilla y León para 2021, garantizan el cumplimiento de este objetivo incrementando en 4 millones de euros la dotación destinada al personal de Salud Pública, alcanzando una cuantía de 59 millones de euros, así como la dotación destinada a los gastos corrientes para asegurar la disposición de medios materiales necesarios en el ámbito de la Salud Pública, que se incrementa en un 65,5%, alcanzando los 23 millones de euros, destacando entre ellos los suministros destinados a la campaña de vacunación contra la gripe y la campaña de vacunación contra la COVID-19.
El considerable aumento de la presión asitencial como consecuencia de la incidencia de la COVID-19, con un elevado volumen de pacientes hospitalizados en un corto periodo de tiempo en cada una de las olas que se han generado por la pandemia, hace necesario mejorar la estructura y dotación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de Sacyl para lo que la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León ha llevado a cabo obras y ha dotado de equipamiento a las UCI de los centros hospitalarios, lo que ha permitido pasar de disponer de 166 camas estructurales de UCI a 227 camas, con una inversión en obras y equipamiento superior a 8,1 millones de euros.
Como consecuencia de esta actuación, Castilla y León pasa de tener una tasa de 7,18 camas estructurales de UCI por 100.000 habitantes, a una tasa de más de 11 camas de UCI por 100.000 habitantes, lo que sitúa a nuestra Comunidad con más de 3 camas de UCI por encima de la media nacional según el último dato publicado.
Además, la Consejería de Sanidad continúa trabajando no solo para seguir incrementando el número de camas UCI, sino también para actualizar y mejorar la dotación de las existentes en todas las áreas de salud de Castilla y León.
Como consecuencia de la pandemia por COVID-19 la Consejería de Sanidad ha constituído en Castilla y León una reserva estratégica de seguridad de materiales de protección individual que permite cubrir de manera suficiente las necesidades del Sistema Público de Salud y para mejorar su gestión se ha firmado un contrato relativo a la logística, almacenamiento y distribución de EPIS, test y material sanitario, que permite la organización de un almacén central que gestione la reserva, además de los almacenes existentes en los centros sanitarios.
Se están realizando las compras necesarias para asegurar la disposición de stock de seguridad de equipos de protección que cubran las necesidades durante los próximos meses y se han formalizado compromisos con proveedores para suministros adicionales en caso de reducción significativa de la reserva. En concreto, desde el inicio de la pandemia se han realizado compras de equipos de protección individual y test diagnósticos (PCR, anticuerpos, antígenos) por importesuperior a los 177 millones de euros, lo que ha supuesto la tramitación centralizada de la adquisición de más de 260 millones de unidades, a lo que hay que añadir las adquisiciones realizadas por los centros e instituciones sanitarias de la Gerencia Regional de Salud que han efectuado también compras de este tipo de material.
Las diversas olas de la pandemia por COVID-19 han obligado al Sistema Público de Salud de Castilla y León a la puesta en marcha de Planes de Respuesta Asistencial en los centros sanitarios, destinando los recursos disponibles a dar la mejor respuesta posible a la situación epidemiológica y asistencial derivada de la evolución de la pandemia.
Por ello, durante los picos más altos de la pandemia la situación de presión asistencial ha obligado al Sistema a centralizar en lo posible la actividad hospitalaria en la atención a los pacientes COVID y en los procesos urgentes, resultando afectada la generalidad de la actividad ordinaria en consultas externas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas.
Desde la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León se trabaja continuamente en la recuperación de la actividad ordinaria en el momento en que la situación epidemiológica y la presión asistencial lo permiten, y en la adopción de medidas específicas para procurar el control de las listas de espera, como el Plan de Ordenación de Listas de Espera (Plan POLE), que incluye y amplía las medidas ya iniciadas durante la pandemia para controlar las demoras, con criterios de eficiencia y optimización de recursos propios, actuando sobre listas de espera de todos los centros Sacyl.