La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, en estrecha e imprescindible colaboración con la Guardia Civil, desempeña funciones de inspección, vigilancia y actuación sancionadora en materia de transportes, de acuerdo con lo preceptuado en la normativa vigente de transportes. Las actuaciones de inspección y vigilancia constituyen un elemento esencial para garantizar las normas básicas de la competencia y mejorar la Seguridad Vial. La actuación del personal inspector, se basa en la previa elaboración por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de un Plan anual de Inspección de Transportes por Carretera. Este plan constituye el instrumento fundamental planificador y coordinador de las diferentes actuaciones a llevar a cabo por los Servicios de Inspección de la Comunidad, priorizando las actuaciones respecto de las infracciones que en cada momento tengan una mayor incidencia, e impliquen una mayor perturbación en la ordenación del transporte